Mediante las distintas réplicas existentes se puede moler tal y como hacían nuestros antepasados, ver cómo se fabrica la corriente eléctrica, ya que el museo posee su propia central que da energía a todo el conjunto. Con una visita exterior a lo largo del canal de abastecimiento se pueden observar molinos de otras culturas como la china y la brasileña. Llegando al final del paseo a una cascada artificial que hace de embalse para poder abastecer de agua al conjunto.
Comprende los molinos de mano (en los que se puede moler tal y como se hacía antiguamente), y los siguientes molinos hidráulicos: molino gravitatorio (funcionando continuamente); molino medieval y molino griego (el visitante los puede poner en funcionamiento abriendo el paso del agua al rodezno).
Ver cómo se molía el trigo en Taramundi hasta hace unas décadas en un molino hidráulico que está en funcionamiento ininterrumpidamente; junto a él existe otro exactamente igual desmontado para poder observar con detalle todos sus elementos y poder comprender mejor su funcionamiento.
Además de la molienda, existe un espacio reservado para comprender el proceso de transformación de energía hidráulica en eléctrica con la central que todavía hoy abastece de energía al conjunto. Una turbina Francis de cámara abierta, a la que llega el agua por un acueducto y que se encuentra en funcionamiento desde 1941.
A través del canal que abastece el conjunto se pueden observar molinos de otras culturas, como el chino, completamente de madera y movido por la fuerza humana, y el brasileño de funcionamiento hidráulico. Llegando a una cascada artificial en donde se corta el río para abastecer de agua a todo el conjunto.
En el museo existen 19 molinos: 8 manuales, 6 hidráulicos, 3 específicos para niños y 2 especiales (éstos dos últimos a tamaño natural, pero expuestos en condiciones ideales, para la compresión de los diferentes elementos de estos ingenios). Se completa la visita al museo con un paseo exterior, vitrinas de elementos relacionados con los molinos y paneles informativos.
Todos los días
de 10:30 a 18:30
Adultos y niños mayores de 10 años:
4,90 €
Niños hasta 10 años (incluido):
2,90 €
Grupos:
3,40 €/persona
Entre el patrimonio artístico de San Martín de Oscos cabe destacar el legendario y majestuoso Palacio de Mon. Condicionado por la disposición inclinada del terreno, su fachada principal está orientada al sur mientras sus cimientos se adaptan a la ladera, encajándose en la crujía oeste bajo rasante mientras va desarrollando altura hacia el este.
Esquíos es una aldea del concejo de Taramundi habitada durante siglos por familias de ferreiros, como la familia Lombardía, emigrada desde Italia hasta el País Vasco y posteriormente a Asturias.
Recientemente, el Ayuntamiento de Villanueva de Oscos, con la colaboración del Principado de Asturias, ha recuperado y rehabilitado las minas de este municipio.
La historia de Villanueva de Oscos camina estrechamente ligada al Monasterio de Santa María, a la entrada de la capital del concejo. Este Monasterio, considerado una da las grandes joyas del patrimonio asturiano y catalogado como Monumento Histórico Artístico, nació románico y creció barroco.
Quedan vestigios en la comarca de los Oscos que nos cuentan que la minería fue una actividad que se desarrolló en la zona desde tiempos prehistóricos. Antes de la conquista de los romanos, los pobladores de esta región ya buscaban pepitas de oro en los placeres de los ríos. Pero fue tras la llegada de éstos cuando se potenció esta industria. En la época Flavia, a principios del siglo I d.C., se vivió una primera edad de oro. Los castros resurgían como consecuencia de las explotaciones y el paisaje se vio salpicado de pequeñas industrias de las que aún quedan restos como: forjas, hornos de función y muestras de la tecnología que se empleó para la explotación del yacimiento.